domingo, septiembre 4

Eres dulce, amargo, salado, ácido, portas todos los sabores. Dulce como la luna, sí, así son tus besos. Amargo como el café, al igual que tus ojos, tan indiferentes y de un simple color. Salado como el mar, siempre en movimiento y fresco. Ácido como el pica-pica, tienes esa chispa. Tienes eso, eres... tutti-frutti.
Y sí, estoy deseando comerte.

La vida nos enseña, está en nosotros tomar o dejar esas pequeñas cosas.

Aprendí que los amores "eternos" pueden terminar en una noche, que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Que nunca conocemos a una persona de verdad, que todavía no inventaron nada mejor que el abrazo de mamá(L Que el "nunca mas" nunca se cumple y que el "para siempre", siempre termina.